Un nuevo viernes en el que continuamos con nuestro proceso de coaching, tras la fase de OBJETIVOS hoy nos metemos de lleno en la segunda fase, conocer nuestra REALIDAD. Porque no podemos empezar a planificar nuestras acciones si no sabemos exactamente de dónde partimos.
Enlaces y notas del episodio
- Episodio 10. El proceso de coaching
- Episodo 15. GROW#1: Goals (Obejtivos)
- Episodio 18. ¡La culpa es de otro!
- El podcast de los Músicos Emprendedores
- Página de podcasts
- Página del blog
- Todos los cursos
- Registro gratis en fase beta durante el mes de septiembre
- Formulario de contacto para feedback
- Facebook de Coaching De Músicos
Transcripción del episodio completo:
El proceso de coaching. GROW #2: Reality (Realidad)
Muy buenos días! Bienvenidas y bienvenidos a Coaching De Músicos
… el podcast en el que hablamos sobre conceptos, hábitos, técnicas, estrategias, conductas, habilidades y competencias del coaching pero enfocadas esta vez a la enseñanza musical y la vida del músico en general.
Porque sí, ¡los músicos también tenemos vida! Y aunque a veces se nos olvide, detrás de cada instrumento hay una persona! Así que vamos a dedicar un poco de tiempo cada día a hablar de esa persona, a hablar de ti: de tus necesidades, aspiraciones, deseos, ambiciones, valores, creencias, miedos, frustraciones… y todo lo que esté en nuestra mano. ¡Esto es Coaching De Músicos!
Hoy es viernes 28 de septiembre de 2018. Un nuevo viernes (no sabéis lo contento que estoy de que termine esta semana…) en el que continuamos con nuestro proceso de coaching, tras la fase de OBJETIVOS hoy nos metemos de lleno en la segunda fase, conocer nuestra REALIDAD. Porque no podemos empezar a planificar nuestras acciones si no sabemos exactamente de dónde partimos.
Pero antes, dejadme que os recuerde que toda la información, el podcast, el blog, las sesiones, los cursos online y todo lo que necesitéis, lo podéis encontrar en CoachingDeMúsicos.com.
Quedan ya solo 4 días para registrarse gratis, con periodo de prueba de 15 días y a partir de ahí mantener un precio de 1€ al mes para siempre. Así que ya sabéis, echadle un vistazo a la web y si os interesa de lo que hablamos en el podcast y los cursos que están por venir… aprovechad y registraros antes del domingo, y así a la larga ahorraréis hasta un 90%.
Y todo esto, por supuesto, sin permanencia ni explicaciones, ¡así de fácil!
Bueno, pues aquí estamos un viernes más, y seguimos con nuestro ciclo sobre el proceso de coaching.
Por si acaso alguno o alguna habéis llegado directamente a este episodio sin pasar por los anteriores, os recuerdo que los viernes hablamos directamente de coaching, del proceso, de conceptos relativos a este proceso… Y en estas semanas estamos destripando el método GROW, como una de las principales técnicas estructurales para organizar, o para estructurar precisamente, un proceso de cambio, que es lo que afrontamos cuando hablamos de proceso de coaching.
Podéis echar un vistazo a los episodios anteriores, el número 10. El proceso de coaching, en el que explicábamos los diferentes métodos y por qué elegimos este para empezar, y el número 15. GROW#1: Goals (Obejtivos), donde ya entramos de lleno en la planificación de nuestros objetivos, nuestras metas, para hacerlo de la manera más adecuada.
¿Qué nos toca ahora? Pues precisamente hablar de la segunda fase, la segunda de las letras de esta palabra tan bonita, GROW. La R de Reality (realidad).
Porque sí, podemos tener los objetivos muy bien planteados, fijados en el tiempo, enunciados positivamente, además seguro que son específicos, medibles, realistas, alcanzables… muy bien! Pero ahora nos toca medir el gap, la distancia que hay entre eso que queremos ser y lo que realmente, a día de hoy, somos.
Y esta fase es igual o más importante aún que la anterior (bueno, igual de importante, digamos), porque si partimos de una base equivocada, si no hacemos un buen diagnóstico de nuestra realidad, no vamos a poder plantear las opciones más adecuadas y que de verdad sean efectivas para alcanzar esos objetivos que tan bien hemos planteado.
Así que vamos allá.
¿Cómo conocemos nuestra realidad?
Sobre esto, lo primero que tenemos que tener en cuenta es que no siempre nosotros seremos los mejores examinadores de nuestra realidad. Es muy importante practicar y desarrollar esa capacidad de autoconocimiento, pero por si acaso, el consejo sería apoyarse también en otras opiniones que podamos valorar y analizar.
Porque, como decíamos este miércoles en la reflexión sobre echarle la culpa a otro, la primera respuesta, la más natural y como medida de autodefensa es culpar a otras personas de cosas que no puedan estar pasando. Esto hay gente que lo hace más y otra que lo hace menos, pero siempre es una tentación. Siempre hay que estar atento ello.
Así que en definitiva, lo que os cuento hoy es una forma de analizar nosotros mismos nuestra realidad, y después una forma de comparar esto con otras opiniones.
Análisis DAFO
La primera opción creo que ya la hemos comentado y es ni más ni menos que hacer un DAFO sobre nuestra situación y sobre nosotros mismos. Aunque ya había salido esta palabra en otros episodios, os cuento exactamente qué es y todas sus partes.
La palabra DAFO es un acrónimo formado por las iniciales de DEBILIDADES, AMENAZAS, FORTALEZAS y OPORTUNIDADES.
DEBILIDADES
Las debilidades son nuestro puntos flacos, las cosas que no se nos dan bien, las habilidades que no hemos desarrollado o simplemente cosas con las que no estamos cómodos y por tanto siempre evitamos hacer.
Por ejemplo, imaginemos que no estamos acostumbrados a hablar en público y de hecho nos da pánico subir a un escenario a hablar ante una audiencia de 100 o 200 personas.
Esto lo decía estos días en el episodio del podcast Músicos Emprendedores, en el que hablábamos de miedos del emprendedor. Y contaba que yo hace un tiempo no tenía ningún problema en subir a un escenario y tocar, pero en cambio si tenía que hablar me quedaba totalmente paralizado. Bueno pues esto sería una debilidad. Una debilidad que yo tenía que analizar para conocer mi realidad en ese momento. Ésta entre otras muchas.
¿Y las debilidades para qué están? Pues para dos cosas: evitarlas o trabajarlas. Y en cada caso veremos qué podemos hacer. Hay que volver y repasar nuestros objetivos en la primera fase del proceso. Si nuestra meta pasa por hacer conferencias una vez al mes ante salas llenas de público, evidentemente tendremos que trabajar en ello. Si en cambio nuestro objetivo es trabajar en una escuela de música que ya conocemos en un pueblo de 50 habitantes, seguramente podemos evitar hablar en público y no pasará nada (por poner un ejemplo exagerado).
FORTALEZAS
Pasamos ahora a las fortalezas, que es la otra característica del DAFO que atañe directamente a la persona, en su interior. Fortalezas es todo lo contrario, lo que se nos da muy bien, nuestros puntos fuertes, lo que hacemos casi sin esfuerzo, lo que estamos acostumbrados a hacer…
Si por ejemplo somos musicos super expresivos, con una musicalidad y un fraeo extraordinarios, y nuestra meta es hacer conciertos de solista, perfecto. Si en cambio nuestra objetivo principal es hacer concursos técnicos en los que se valora quién puede hacer más notas en un minuto… lamentablemente nuestra fortaleza no nos va a ayudar mucho (de nuevo exagerando en el ejemplo, eh).
¿Y las debilidades para qué están? Para explotarlas al máximo. Sacar todo el provecho posible de ellas. Al contrario de lo que a veces se hace que es decir “vale, con esto ya voy bien, tengo que trabajar mucho en mis debilidades…”, ¡no! Vale, está bien trabajar en las debilidades, pero hasta un punto. Lo que tenemos que hacer sobre todo explotar al máximo nuestras fortalezas, destacar extraordinariamente por nuestras fortalezas!
¿Y qué pasa con las otras dos palabras?
AMENAZAS y OPORTUNIDADES
Estas no se refieren tanto a la persona, a lo que sabe hacer o se le da mejor o peor, sino a su entorno, al sector en el que pretende desarrollar su actividad. A veces cometemos el error de analizarnos solo a nosotros, a nuestras fortalezas y debilidades, para conocer nuestra realidad. Pero nuestra realidad es también el mundo en el que vivimos, y también de todo lo que pase en ese mundo va a depender, en cierta medida, lo que seamos capaces de hacer.
Si os fijáis, cuando planteábamos los objetivos, una de las premisas era que fueran realistas y alcanzables. Y también que fueran éticos, legales, apropiados… Todo esto tiene que ver con el entorno en el que pretendemos alcanzar esos objetivos. Por tanto, a la hora de analizar el punto en el que estamos, el punto de partida para ir a por esos objetivos, será muy importante conocer también las AMENAZAS y las OPORTUNIDADES que ese propio entorno nos brinda.
Supongamos, por poner otro ejemplo un poco exagerando, que nuestro objetivo a 2 años vista es hacer 20 pruebas de orquesta en EEUU y además bien preparados y en disposición de conseguir un trabajo en alguna de ellas. Perfecto. Además una de nuestras fortalezas es el repertorio orquestal y además hemos trabajado en el estilo que se busca en EEUU porque aunque era una de nuestras debilidades, hemos conseguido superarla.
Muy bien, pero es que resulta que no está previsto que en los próximos 2 años salga ninguna audición de orquesta de nuestro instrumento en todo EEUU. Simplemente es que esa OPORTUNIDAD no existe.
Por tanto, como decía, será muy importante valorar tanto los factores internos como externos de nuestro DAFO.
FEEDBACK
Muy bien, pues ahora ya nos hemos analizado. Ya tenemos una idea que creemos que es muy cercana o exacta sobre lo que hacemos mejor, peor, y las oportunidades o amenazas que hay en nuestro camino.
Pero resulta que le contamos a nuestra pareja todo esto. Le decimos que hemos analizado que como fortaleza tenemos nuestra constancia, dedicación y capacidad de concentración. Y nos contesta: “¡Qué va, pero si tu a la mínima te estás levantando y te despistas con la primera mosca que pasa!”. (Sería un caso extraño, que pensáramos tan diferente).
Pero algo más habitual: resulta que nos consideramos un poco tímidos, que de primeras no nos lanzamos mucho a hablar con la gente, con lo que pensamos que una debilidad nuestra sería que las relaciones sociales no son nuestro fuerte y que necesitamos trabajarla. Porque para nuestro objetivo es importante. Pero ante eso, la mayoría de las personas que conocemos nos dicen: “‘¡Qué va! Es una sensación tuya. Todos los que te conocen dicen que de primeras eres muy agradable y que tienes muy buena conversación. Que no eres muy parlanchín, pero para nada que seas tímido o poco sociable!
¿Qué está pasando entonces? Que puede ocurrir que nuestra percepción sobre nosotros mismos no se ajuste a la que otros u otras tienen de nosotros. En este caso concreto puede tratarse de autoconfianza, de autoestima, de creencias limitantes…
Por eso es tan importante pedir feedback a personas de confianza. Y cuanto más mejor. Evidentemente no vamos a ir preguntando por ahí a todo el que veamos qué piensa nuestras fortalezas y debilidades. Pero seguro que tenemos un grupo de amigos, o pareja, o familia, gente en la que confiamos, que nos quiere, pero que también sea sincera.
Hay una modalidad de la que alguna vez hemos hablado en estos 20 episodios, que es el feedback 360º. Sobre todo se utiliza en el coaching empresarial, con distintos estamentos de la organización. Pero en caso personales, de estudios, de trabajo, de nuestros proyectos, se puede aplicar intentando pedir ese feedback a personas de ámbitos muy distintos. Por ejemplo nuestros padres nunca van a tener la misma percepción sobre nosotros que nuestros amigos y amigas, o que nuestro profesor, o que las personas del trabajo o del conservatorio a las que vemos todos los días en la cafetería. Incluso el personal de limpieza o de seguridad del centro con el que hablamos dos minutos cada día.
En cada caso habría que decidir a quién y sobre qué se pide este feedback, pero es un concepto interesante a tener en cuenta.
Y una vez recopilado todo el feedback posible, llega el momento de compararlo entre sí y con nuestra propia percepción.
Esto del feedback seguro que os suena, porque yo no paro de repetiros, que estoy encantado de recibir cualquier comentario o sugerencia por vuestra parte. ¿Por qué? Por “todo esto solo tendrá sentido si es exactamente lo que vosotras y vosotros queréis”.
Porque yo puedo hacer mi propio análisis de la realidad, pero quien de verdad sabe qué os interesa y qué no sois vosotros y vosotras.
Así que espero vuestros comentarios, ya sea en Facebook, en las reseñas de iTunes, en los comentarios de iVoox o directamente en coachingdemusicos.com/contactar.
Hoy es viernes, y eso quiere decir que nos espera un dia estupendo y sobre todo un estupendo fin de semana para descansar, relajarnos, trabajar un poco los que tenemos que hacerlo, y sobre todo en mi caso para NO HABLAR. Así que espero estar aquí a pleno rendimiento el lunes a partir de las 7:11 con un nuevo episodio.
Hasta entonces: ¡MUY BUEN FIN DE SEMANA!