En este episodio 42 vamos a volver sobre un concepto que hemos comentado alguna vez, pero sobre el que aún podemos profundizar más. Y es algo tan simple como establecer objetivos diferentes para cada alumno o alumna. Y diferenciarlos de los objetivos de la escuela.
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Transcripción del episodio completo:
Una persona, un objetivo
Muy buenos días! Bienvenidas y bienvenidos a Coaching De Músicos
… el podcast en el que hablamos sobre conceptos, hábitos, técnicas, estrategias, conductas, habilidades y competencias del coaching pero enfocadas esta vez a la enseñanza musical y la vida del músico en general.
Porque sí, ¡los músicos también tenemos vida! Y aunque a veces se nos olvide, detrás de cada instrumento hay una persona! Así que vamos a dedicar un poco de tiempo cada día a hablar de esa persona, a hablar de ti: de tus necesidades, aspiraciones, deseos, ambiciones, valores, creencias, miedos, frustraciones… y todo lo que esté en nuestra mano. ¡Esto es Coaching De Músicos!
Hoy es martes 30 de octubre de 2018, hace un frío que pela, y en este episodio 42 vamos a volver sobre un concepto que hemos comentado alguna vez, pero sobre el que nunca hemos profundizado. Y es algo tan simple como establecer objetivos diferentes para cada alumno o alumna. Y diferenciarlos de los objetivos de la escuela.
Pero antes, dejadme que os recuerde que toda la información, el podcast, el blog, las sesiones, los cursos online y todo lo que necesitéis, lo podéis encontrar en CoachingDeMúsicos.com.
Como sabéis, esta es la última semana para registraros y mantener este precio de 1€/mes para siempre, porque a partir del lunes que viene empezaremos a publicar el segundo de los cursos con todo su contenido y el precio subirá a 2€/mes. Así que ya sabéis, echadle un vistazo a la web y si os interesa de lo que hablamos en el podcast y los cursos que están por venir… aprovechad y registraros ahora. Y mantendréis ese precio para siempre.
Mientras queráis continuar, porque aquí no hay permanencia ni explicaciones.
Puf! Qué frío hace en Madrid estos días!! Ya sé que varias de las personas que me escucháis los hacéis desde Argentina, Chile, México, incluso California, así que he mirado un poco vuestras temperaturas estos días y… ya veo que estáis bastante más calentitos que por aquí.
Y eso que a mí me gusta el frío y el invierno en general, pero es que esta vez ha llegado sin avisar!
Bueno, vamos a entrar un poco en calor, hablando un día más sobre enseñanza musical, y sobre estos conceptos que el coaching puede aportarnos en nuestra labor docente.
De hecho, el tema de hoy lo hemos tocado ya varias veces, cuando hemos comentado que los objetivos debían estar al alcance y si era posible algunos muy cerca, en el episodio 12, por ejemplo. Y también en el primer episodio en el que hablé de enseñanza musical, en la introducción que hice en el episodio 2. Y en otros casos lo he dicho por encima.
Pero después de hablar con varios de vosotros y de vosotras, comentando los episodios que más os gustan, los que os aportan más y los que menos, me ha dado la sensación de que nunca he puesto tanto énfasis y explicado claramente por qué creo tan importante que los objetivos de cada alumno o alumna sean individuales, diseñados específicamente para cada uno de ellos o ellas. Y claro, ya me conocéis, si puede ser, con ellos o ellas siendo partícipes del planteamiento de esos objetivos.
También decíamos el martes pasado hablando del «empowerment«, que esto contribuía a que los mismos alumnos y alumnas estuvieran después más implicados y más motivados. En el caso de los objetivos, uno de los motivos más evidentes sería este también, que cuando alguien pone sus propios objetivos, se siente mucho más comprometido y motivado hacia ellos.
Pero incluso si no nos es posible hacerlo junto a los alumnos, o sí lo hacemos con su ayuda, guiándolos, pero al final tenemos que tomar decisiones y fijar esos objetivos nosotros mismos, hay muchas razones para que cada persona tenga sus propios objetivos, diferentes, únicos.
Vamos a ver algunos ejemplos y os voy contando un poco más.
Por ejemplo, sabemos, porque lo hemos hablado muchas veces, que los objetivos deben ser específicos, bien. Pero también ser alcanzables.
¿Pensáis que un mismo objetivo puede ser alcanzable para dos personas diferentes, con condiciones diferentes, experiencias y aprendizajes diferentes, o dificultades diferentes?
Por ejemplo, si fijáramos el objetivo de trabajar durante un trimestre 2 conciertos de trompeta y 10 estudios de uno de los métodos… Seguro que ya estáis pensando que habrá algún alumno que tendrá más posibilidades de alcanzarlo, pero habrá otros que necesiten otro ritmo de trabajo, que necesiten trabajar primero otros ejercicios, o solo un concierto será suficiente si puede trabajar con él ciertos aspectos técnicos y musicales.
Y claro, según para quién esto será un reto más ambicioso o menos, que es otro de los controles para considerar que un objetivo está bien planteado, ¿os acordáis? Y habrá cosas que motiven más a unos que a otros, evidentemente, porque como digo siempre, somos personas diferentes. Y es muy difícil pensar que todos necesitemos o deseemos hacer lo mismo. Por eso nuestras motivaciones pocas veces serán las mismas. Si ni siquiera lo son en una misma persona en diferentes etapas de su vida…
También podemos estar de acuerdo en que los objetivos deben ser relevantes… ¿relevantes para qué? Pues para la meta final que cada uno tenga. Pero claro, en un grupo de alumnos y alumnas, lo más seguro es que la meta final no sea la misma para todos los miembros del grupo. Quizás uno quiera ser profesor, otro concertista solista, otro tocar en orquesta, otro dedicarse al pop y otro ser futbolista. Así que, ¿cómo van a ser unos mismos objetivos relevantes para tantas metas diferentes?
Pero en cambio esto es lo que ocurre en la mayoría de los caso. Ya lo decíamos en aquel episodio número 2, al principio de todo esto. Lo más habitual es que primero se fijen los objetivos de un curso o de un ciclo. Y a todas las personas que vayan a pasar por ese curso o ese ciclo se les aplicará un método para alcanzar dichos objetivos. Pero seguramente nadie les preguntará nunca si ese objetivo está alineado con sus creencias, les motiva, en el peor de los casos si lo entienden, o si es realista en las condiciones que tiene cada uno de ellas.
Y aquí viene una de las cosas que me vienen a la cabeza cuando pienso en esto: ¿qué diferencia hay entre los objetivos del centro y los objetivos del alumnado?
Porque muchas veces podría pensarse que planificamos los objetivos de nuestros alumnos y alumnas pensando en lo que queremos para el centro. Si lo pensáis bien…: queremos que cuando nuestros alumnos terminen las enseñanzas elementales toquen escalas con 2 o 3 alteraciones, que cuando terminen enseñanzas profesionales hayan tocado no sé cuántos conciertos, y así organizamos su estudio o su trabajo.
Pero estos no son los objetivos de nuestros alumnos o alumnas. O al menos, seguro que no el de todos y todas ellas.
Y sobre todo, estos objetivos se han fijado previamente, cuando ni siquiera conocíamos a esas personas a las cuales vamos a evaluar en relación al grado de consecución de esos objetivos. Según lo cerca o lo lejos que se queden de cada objetivo, o si lo alcanzan o no, les pondremos una nota u otra, o les suspenderemos si ni siquiera se acercan.
Ya sé que lo habíamos comentado alguna vez, pero me parece tan importante que creo que es un tema que saldrá recurrentemente en este podcast. Al menos siempre que hablemos de enseñanza musical, o del proceso de enseñanza-aprendizaje, creo que no voy a poder evitar volver a pensar en quién fija los objetivos, quién los tiene que cumplir y cuánto participa esa persona que los tiene que cumplir en su planteamiento.
Y aunque algunas de las cosas que hemos hablado hoy las hubiéramos comentado antes por encima, creo que valía la pena hablar un poco más específicamente de ello.
Y ahora la última parte. Vosotros y vosotras como alumnos, ¿qué pensáis de esto?, ¿cuáles son vuestros objetivos?, ¿coinciden con los del centro?, ¿son los mismos que los del resto de compañeros y compañeras? Pensad si os estáis dejando llevar por los objetivos que os ponen o si tenéis algo que decir, si cambiaríais algo, si hay algo que no va en la dirección de lo que queréis.
Y no solo lo penséis, empezad a hablar de ello.
Si queréis aquí mismo. Tanto si sois alumnas o alumnos como si sois profesores o profesoras. Porque ya sabéis que “todo esto solo tendrá sentido si es exactamente lo que vosotras y vosotros queréis”.
Así que espero vuestros comentarios, ya sea en Facebook, en las reseñas de iTunes, en los comentarios de iVoox o directamente en coachingdemusicos.com/contactar.
Volvemos mañana miércoles a partir de las 7:11, fresquitos pero con una nueva reflexión para empezar a calentarnos desde la mañana.
Hasta entonces ¡MUY BUENOS DÍAS!