Hoy reflexionamos sobre tres factores que pueden dar al traste con nuestro proceso de cambio. En realidad, tres niveles de resistencia al cambio que pueden aparecer durante el proceso y que no habría que confundir. Cuando no hacemos algo que necesitamos hacer, ¿es porque no sabemos, no podemos o no queremos hacerlo?
Ver en iVoox · Ver en iTunesEnlaces y notas del episodio
- Página de podcasts
- Página del blog
- Todos los cursos
- Registro gratis en fase beta durante el mes de septiembre
- Formulario de contacto para feedback
- Facebook de Coaching De Músicos
Transcripción del episodio completo:
No sé, no puedo, no quiero. Niveles de resistencia
Muy buenos días! Bienvenidas y bienvenidos a Coaching De Músicos
… el podcast en el que hablamos sobre conceptos, hábitos, técnicas, estrategias, conductas, habilidades y competencias del coaching pero enfocadas esta vez a la enseñanza musical y la vida del músico en general.
Porque sí, ¡los músicos también tenemos vida! Y aunque a veces se nos olvide, detrás de cada instrumento hay una persona! Así que vamos a dedicar un poco de tiempo cada día a hablar de esa persona, a hablar de ti: de tus necesidades, aspiraciones, deseos, ambiciones, valores, creencias, miedos, frustraciones… y todo lo que esté en nuestra mano. ¡Esto es Coaching De Músicos!
Hoy 31 de octubre de 2018, episodio número 43, reflexionamos sobre tres factores que pueden dar al traste con nuestro proceso de cambio. En realidad, tres niveles de resistencia al cambio que pueden aparecer durante el proceso y que no habría que confundir. Cuando no hacemos algo que necesitamos hacer, ¿es porque no sabemos, no podemos o no queremos hacerlo?
Pero antes, dejadme que os recuerde que toda la información, el podcast, el blog, las sesiones, los cursos online y todo lo que necesitéis, lo podéis encontrar en CoachingDeMúsicos.com.
Ya sabéis que esta es la última semana para registrarse en Coaching De Músicos pagando 1€/mes, porque la próxima semana empezaremos a publicar el segundo de los cursos con todo su contenido y el precio subirá a 2€/mes. Isa, gracias por tu comprensión. Así que echadle un vistazo a la web y si os interesa de lo que hablamos en el podcast y los cursos que están por venir… aprovechad y registraros ahora para mantener ese precio para siempre.
Mientras queráis continuar, claro, porque aquí no hay permanencia ni explicaciones.
Bueno, ya estamos a mitad de esta semana cortita llena de fiestas y celebraciones. Pero aunque sea fiesta mañana a mucho sitios, ya sabéis que habrá un nuevo episodio del podcast (si no pasa nada grave).
Y en este miércoles, de momento de reflexión, quería empezar a traer un tema del que vamos a hablar mucho en el futuro. Se trata de la resistencia, la resistencia al cambio. Es una palabra muy utilizada en los procesos de coaching.
Os cuento un poco sobre ella antes de entrar en concreto en el tema de hoy. Aunque de todas formas explicaremos con mucho detalle todo lo referente a la resistencia en los próximos episodios de los viernes, ahora que ya hemos hablado mucho del proceso de coaching y lo podemos aparcar de momento. Eso después de la semana que viene, que ya sabéis que todos los días tenemos entrevistas con otros coaches.
Pues… la resistencia podríamos decir, así rápido, que es la oposición que ponemos a nuestro propio cambio. Ya sabemos que inconscientemente el cambio da miedo y que muchas veces, también inconscientemente, ponemos trabas a que ese cambio o esa mejora pueda darse. ¿Os habéis parado a pensar alguna vez, cuando no conseguís algo, si puede que estéis impidiéndolo vosotros mismos inconscientemente?
A veces es poniendo excusas, o llevando a cabo acciones contrarias sin darnos cuenta, o siguiendo hábitos que no nos ayudan… Es algo natural, en el fondo, porque todos nos resistimos a los cambios que pueda haber en nuestra vida, por diferentes miedos o por nuestros valores o creencias. Pero cuando sí queremos hacer ese cambio o creemos que es necesario hacerlo, tendremos que intentar vencer esa resistencia.
Pues aquí es donde realmente empieza el tema de hoy (aunque la introducción sobre la resistencia nos vendrá muy bien para cuando hablemos en profundidad de ella).
Niveles de resistencia
Cuando empezamos a notar cierta resistencia, que normalmente lo notamos porque el cambio no acaba de darse o tarda más de lo que esperábamos, lo primero es analizar las posibles causas. Y hay principalmente tres factores en los que nos podríamos fijar.
Hay gente que llama a esto «los tres niveles de resistencia», cuando es a nivel personal. Y son los tres que podéis ver en el título de hoy:
- No sé
- No puedo
- No quiero
Saber esto es muy importante, porque sabiendo dónde están las causas vamos a poder empezar a poner soluciones. Y cada uno de estos niveles tiene un tipo de solución perfecta para eliminar esa resistencia.
Por ejemplo, imaginemos que pretendemos un cambio en nuestra carrera, que a partir de ahora tenderá más a los conciertos en salas pequeñas de cámara, como solista o en formación pequeña. Y esto implica empezar a hacer contactos con programadores, visitar salas diferentes, enviar propuestas…
Podría darse el primer caso, el «no sé«. No sé por donde empezar, no sé cómo contactarles, no sé si es mejor hacerlo por mail, por teléfono o en persona…
En este caso la solución, la forma de vencer esa resistencia vendría de la mano de la información y cierto grado de formación básica al respecto. Y si lo hemos analizado y tenemos claro que por ahí van los tiros, sabremos que entonces necesitamos conseguir un directorio de salas de concierto o teatros pequeños, conseguir todos sus correos electrónicos, hablar con algún manager o alguien que esté habituado a hacerlo para que nos aconseje, visitar alguno de los centros para tantear el terreno… pero básicamente es eso lo que nos falta, la información y la formación básica sobre cómo hacerlo. Y como vemos, no debería ser algo que nos vaya a costar años de formación. Simplemente se trata de conseguir la información necesaria para llevar a cabo nuestra tarea.
El segundo de los casos, el «no puedo«, ya implica algo más. En el mismo ejemplo de antes, podría darse el caso de que no sabemos cómo preparar una propuesta de concierto o un dossier para presentar, o no hemos planificado y programado aún las obras porque no las hemos estudiado todavía, o es que cuando estamos delante de una persona que tiene que decidir si nos contrata o no, no sabemos cómo expresarnos y presentarle el proyecto para que le parezca interesante.
Aquí ya no se trata de conseguir una información que nos ayude a tener respuestas, sino más bien de desarrollar ciertas habilidades que nos van a permitir hacer esas tareas, y adquirir así esas competencias.
Diseñar, maquetar y llenar de contenido una propuesta de concierto no es nada fácil, si no lo hemos hecho nunca posiblemente tengamos que aprender a hacerlo y con ello mejorar, desarrollar una de nuestras habilidades. O si se trata de programar lo mismo. Si necesitamos estudiar las obras primero, nos llevará un tiempo leerlas, estudiarlas y tenerlas preparadas para los concierto. O sea, tendremos que desarrollar nuestra técnica, nuestra musicalidad, nuestra capacidad de estudio. Y al final, por medio de estas habilidades, adquirir la competencia necesaria para lo que necesitemos.
Y llegamos al tercer caso, al tercer nivel, que es «no quiero«. Esto no suele ser tan evidente como saber que no quieres hacer algo y ya está. De hecho, si se tratara de algo que de verdad no quieres hacer, pues no lo haces, y habrá que cambiar entonces los objetivos y la meta.
Esta parte suele referirse a valores, creencias, aspectos de la personalidad o del carácter… Sobre todo a esas creencias limitantes. Si por ejemplo nos han dicho mil veces que no sabemos hablar en público, o que negociar no es lo nuestro, o sentimos que somos tímidos y enfrentarnos a una reunión con un director de una sala nos asusta.
Claro, evidentemente, si es así, inconscientemente no vamos a querer ir a venderle nuestro proyecto. Seguramente nos de bastante miedo fracasar en el intento o no dar buena sensación.
O pensando en un caso más extremo (pero que también pasa), simplemente que estemos muy a gusto preparando todo desde casa, pero nos dé pereza ir en persona hasta el sitio concreto donde tenemos que entregarlo o que negociar.
En este caso, la solución tendría que ver más con los incentivos (tanto positivos como negativos) que podemos ponernos. Si por ejemplo decidimos premiarnos después de cada reunión («después de ir a entregar estas 10 propuestas me voy a comer a ese restaurante vegano que tanto me gusta»). O si planeamos la salida para pasar después a visitar a una persona que nos hace ilusión ver. Aquí es donde entra en juega esa motivación, tanto intrínseca como extrínseca, que hablamos ya hace un tiempo en el episodio número 7. Bueno, en este caso, si lo que sentimos es que no queremos, habrá que recurrir más bien a la motivación extrínseca. Vamos, a premiarnos o castigarnos por lo que hagamos en relación al objetivo y a la resistencia al cambio.
Repasando, tendríamos:
- «No sé» -> Información o formación básica
- «No puedo» -> Desarrollar habilidades y adquirir competencias
- «No quiero» -> Creación de incentivos (positivos y negativos; materiales e inmateriales)
¿Qué os parece?
Lo que podemos reflexionar hoy sobre esto es qué está pasando para que ese cambio por el que estamos trabajando no acabe de llegar. Que eso que hacemos para conseguir los objetivos que nos hemos fijado, no acabe de dar sus frutos.
Y entonces analizar si tenemos algún tipo de resistencia que nos esté fastidiando y que podamos eliminar, ya sea con información y formación, desarrollando ciertas habilidades o creando incentivos que nos motiven.
Por cierto, ¿qué os incentiva a vosotros y a vosotras a escribirme? ¿Algo que queréis que cambie en este podcast? ¿O en el proyecto en general?
Pues ya sabéis que estaré encantado de escucharos o de leeros, porque “todo esto solo tendrá sentido si es exactamente lo que vosotras y vosotros queréis”.
Así que espero vuestros comentarios, ya sea en Facebook, en las reseñas de iTunes, en los comentarios de iVoox o directamente en coachingdemusicos.com/contactar.
Mañana jueves ¿qué toca? Exacto! Productividad! Así que volveré a estar aquí a las 7:11 con toda la energía, para contaros algo más que espero que os resulte interesante.
Mientras tanto, pasad un día estupendo y ¡NOS ESCUCHAMOS MAÑANA!